Al encuentro asistieron más de 400 profesionales de la Educación.
El objetivo marcado por el congreso fue la formación del personal docente, proporcionando a los educadores las estrategias para promover, fortalecer y desarrollar las competencias que cada niño posee.
Otro de los fines del encuentro fue mostrar a los educadores fórmulas para buscar experiencias educativas en las que los niños pongan en juego un conjunto de capacidades de distinto orden –afectivo y social, cognitivo y de lenguaje, físico y motriz– que se refuerzan entre sí. En general los aprendizajes de los niños abarcan simultáneamente distintos campos del desarrollo humano.
Por eso es necesario que los docentes diseñen estrategias y recursos que impliquen un desafío para los niños. Esto favorece que avancen paulatinamente en sus niveles de logro –que piensen, que se expresen por distintos medios, propongan, distingan, expliquen, cuestionen, comparen, trabajen en colaboración y manifiesten actitudes favorables hacia el trabajo y la convivencia, etc.–, lo que les llevará a aprender más acerca de su conocimiento del mundo y favorecerá que sean personas cada vez más seguras, autónomas,
creativas y participativas.
Las conclusiones alcanzadas fueron que:
• La sociedad en su conjunto tiene la responsabilidad de velar por el desarrollo de los niños.
• Las competencias pueden jugar un papel importante para articular propuestas de base en un trabajo curricular de ámbito internacional.
• La Ley Orgánica de Educación (LOE) expresa la importancia de potenciar las competencias básicas para lograr el progreso integral de los menores.
• Las destrezas básicas suponen una referencia para la organización y el funcionamiento de los centros de Educación Infantil, las actividades docentes, las formas de relación que se establezcan entre los integrantes de la comunidad educativa y las actividades complementarias y extracurriculares, así como la coordinación entre el primer y el segundo ciclo de la Educación Infantil, y de esta con la Educación Primaria.
• Todas estas capacidades son igualmente importantes y favorecen que los niños se inicien en los aprendizajes y deseen seguir aprendiendo para otorgar un significado apropiado a todo lo que descubren sobre sí mismos y sobre el mundo.