Según la Encuesta de Población Activa (EPA) del segundo trimestre de este año, el 17% de los parados españoles está cursando algún tipo de estudio reglado o no reglado, algo menos de una quinta parte de los desempleados. Este porcentaje baja hasta el 14,42%, en el caso de los parados varones y se eleva al 20,5%, en el caso de las mujeres paradas que, con mayores tasas de desempleo, optan por seguir estudiando en mayor medida que los hombres.
Pero no sólo el sexo influye en el ánimo de los desempleados a la hora de estudiar; las cifras de la EPA demuestran que, a medida que aumenta el nivel de formación de los desempleados, más proclives son éstos a estudiar mientras permanecen en paro.
Formación y empleo
La encuesta refleja claramente que formación y empleo son dos realidades estrechamente ligadas. La tasa de desempleo durante el segundo trimestre se ha situado en el 20,09% de la población activa, pero este porcentaje se incrementa hasta el 45,82% en el caso de los desempleados que carecen de formación y hasta el 30% entre los que sólo poseen formación primaria.
Sin embargo, la tasa de desempleo entre quienes poseen un título de Educación Secundaria baja hasta el 19,32%, hasta 11,03% en el caso de los universitarios y hasta el 3,71% entre quienes poseen un doctorado. La tasa de paro es ligeramente mayor en los varones que en las mujeres sólo en los estratos de población sin estudios o con estudios primarios; a medida que la formación aumenta las tasas de desempleo son mayores entre las mujeres que entre los varones.
El incremento ha sido del 2,2% (162.892 alumnos más) en el conjunto de las enseñanzas no universitarias de régimen general, según el avance estadístico del 2009-10.